The Addams Family
The Addams Family
Hoy en día ya no tanto, pero antiguamente era muy común ver películas recién llegadas al cine en su versión videojuego. Después de todo, este nuevo arte de entretenimiento estaba empezando a despertar y a pegar fuerte, y conseguir la licencia de una película para posteriormente explotarla audio-visualmente en este entorno de entretenimiento, podía generar considerables ganancias, que apoyadas por la publicidad de la película en si, creaba un lucrativo efecto llamada y convertía a este medio de obtención de capital en una autentica golosina, aunque el resultado final poco tuviese que ver con el film. Este es el caso del videojuego de The Addams Family.
En España fueron conocidos bajo su nombre traducido como La Familia Addams, y en América Latina como Los locos Addams. Nacidos de una serie de televisión de los años 60, fueron de los primeros partícipes de la fiebre remake que lleva Hollywood realizando desde los años 90 hasta hoy en día de cualquier época pasada. De esta forma, las nuevas generaciones podían conocer al padre de familia Gómez y a su mujer Morticia, al tío Fétido, a la Abuela Addams, a los niños maníacos Miércoles y Pugsley, a Cosa (una simple mano saltarina), al peludo primo Eso, y al mayordomo Lurch, en sus múltiples peripecias humorísticas donde trataban el tema de la familia media americana desde un punto de vista tenebroso y con un humor muy negro.
En nuestra NES, ya había hecho aparición el videojuego Fester´s Quest de la mano de Sunsoft en 1989, donde podíamos controlar al tío Fétido (Fester) en una aventura muy notable, pero cuyo sobrenombre referente a La Familia Addams quedaba simplemente como eso, como una referencia sin importancia.
Fue Ocean quien se llevó el gato al agua con la licencia de la película recién estrenada en las salas de cine, sacando múltiples versiones tanto para NES como para otras consolas y micro-ordenadores de 8 y 16 bits de la época. Por alguna razón, estas aventuras tienen poco que ver entre si en algunos casos, encontrándonos con juegos totalmente diferentes entre unas plataformas y otras. En nuestro caso, la NES recibió una aventura muy diferente a los visto en los micro-ordenadores y consolas superiores, y si que luego tuvimos que ver versiones de este videojuego en su competidora directa de 8 bits Sega Master System un poco más pulida y con mejor detalle técnico.
El Juego
Nos encontramos ante un plataformas típico de la época con el aliciente de exploración, que es lo que le hace interesante. Escenarios con múltiples obstáculos, recolección de objetos para conseguir acceder a ciertos lugares, rescate de personajes, y objetivo monetario a rebasar para acceder a la última parte del juego. De esta forma, tomamos el control de Gómez, el padre de familia de Los Addams.
Resulta que el tío Fétido, tras un estado de amnesia, se ha vuelto loco, y con ayuda de su abogado, Tully Alford, han secuestrado a la Familia Addams, escondiendo a sus miembros en diferentes puntos de la Mansión de los Addams. De hecho, estos dos se han atrincherado en las mazmorras de la mansión, en la bóveda del tesoro de la familia Addams, y tienen recluida también allí a Morticia, la amada mujer de Gómez. Tan solo Lurch, nuestro mayordomo, estará libre, vivito y coleando y nos ayudará en nuestra aventura en algún caso puntual. Sabiendo todo esto nos apresuraremos al rescate.
Así pues, nuestro objetivo primordial es rescatar a nuestra amada Morticia; pero para conseguir llegar hasta ella debemos recolectar hasta un millón de dolares desperdigados por toda la mansión, que es la cantidad de dinero que nos servira para poder pesarse en la cámara de seguridad y que nos permite entrar en la bóveda del tesoro y acabar con estos dos villanos.
También tenemos que buscar y rescatar al resto de miembros de la familia. Su principal dificultad radica en averiguar donde están y como llegar hasta ellos, aunque en el caso de Pugsley debemos recolectar una serie de ingredientes para crear una poción que le saque de su cautiverio... ¿como? Pugsley es gordo y nos le encontraremos atrancado en una de las paredes de la mansión. La pócima servirá para que adelgace y pueda escapar. Cabe añadir que tenemos barra de energía que nos aguantará bastantes daños, tres vidas y tres continuaciones. Independientemente de como utilicemos nuestra energía, a la hora de morir apareceremos al inicio de las habitaciones donde nos encontramos, hayamos usado una vida o una continuación, así que es como si tuviéramos nueve vidas.
También hay algún objeto que simplemente nos servirá para acceder a zonas secretas donde poder recolectar más dinero, necesario para que al final nos salgan las cuentas, o llaves que debemos localizar o que simplemente nos entregará algún personaje para poder acceder a otros lugares donde poder proseguir con nuestra odisea. Además, cuando rescatemos a Cosa, podremos usarle hasta tres veces para que nos proporcione invencibilidad durante un tiempo determinado, muy a tener en cuenta si queremos pasar alguna que otra situación sin mayor problema.
El problema de este juego no radica en su planteamiento, que es desde luego sobresaliente. De hecho, pocos juegos de la época nos dan esa libertad de movimiento y exploración que en contadas ocasiones se han visto en NES, dado que tenemos toda una mansión por recorrer y descubrir a placer, pasando por sus jardines, el cementerio, un estanque y hasta un árbol que está hueco; intercalando niveles de plataformeo puro y duro con otros de meros puzles o que simplemente sirven de decoración para que nos creamos de verdad que estamos dentro de una gran casa familiar.
No, el mayor punto negro de The Addams Family radica en su jugabilidad. Es nefasta. Por contar alguna cosa breve: el control de Gómez, aunque correcto, tiene demasiados puntos ciegos de colisión que provocan que muchas veces el acceso a alguna plataforma no sea del todo preciso, provocando que atravesemos paredes, no consigamos destruir enemigos correctamente (la mayoría mueren cuando les golpeamos saltando encima), etc... Y ya veréis cuando tengáis que hacer uso de la habilidad de nadar... Se convierte en un sin vivir que nos hará preguntarnos el cuanto les hubiese costado copiar el estilo de nado de Super Mario.
Llama la atención, que el mínimo roce con un enemigo y/u objeto punzante ya reste nuestra energía vital irremediablemente. Pero ya a la hora de coger los sacos de monedas estos solo son obtenidos cuando les tocamos con la zona de los pies de Gómez, lo que nos lleva a más de una confusión e incertidumbre a la hora de calcular saltos.
Para colmo, existen demasiadas trampas inevitables e invisibles que provocan caídas pocas veces salvables o que hacen que nos lleven a sitios de la mansión muy lejanas con respecto al lugar donde estábamos, lo que provoca el aumento de nuestra frustración a no ser que hayamos repetido el nivel muchas veces y nos lo sepamos de memoria; o el simple hecho de tener que descubrir dos habitaciones secretas de las cuales nadie habla y que solo la casualidad hará que lleguemos hasta ellas. Por cierto, estas dos habitaciones son importantes dado que contienen parte del dinero que nos permite recolectar ese millón de dolares que necesitamos. Os podeís hacer una idea de por donde voy.
Digamos que son costumbres de programación muy de la vieja escuela. Un poco tramposas. Equipos de desarrollo acostumbrados a los micro-ordenadores de la época y sus bajas capacidades, que tiraban de este tipo de trampas irracionales para alargar sus juegos.
Pero lo peor de todo es que existen lugares con múltiples errores de programación que convierten al juego en imposible de superar si tenemos la mala suerte de caer en algunas habitaciones con fallos. Por ejemplo, en la chimenea, puede ocurrir que cuando aterricemos al final de este nivel, Gómez sea incapaz de hacer pie en el suelo, provocando que su sprite lo atraviese y nunca termine de caer hasta que el buffer de memoria de la NES se llene y nuestra consola se quede congelada sin posibilidad de volver atrás, con lo cual no nos quedaría más remedio que reiniciarla. También hay habitaciones secretas con este error, así que mucho ojo.
Estas cosas hacen injustamente difícil un juego que bien podría haber sido redondo. A veces da la sensación de que los desarrolladores del código fueron un poco deprisa y corriendo y no supieron corregir a tiempo estos problemas absurdos.
De todas formas, después de jugar unas cuanta horas, aprenderemos donde si y donde no pisar, así como el orden más adecuado para rescatar a nuestra familia y obtener objetos; lo cual harán de este The Addams Family un paseo.
Así que de acuerdo: el juego tiene muchos fallos, pero se deja jugar y no es imposible.
Gráficos
El estilo gráfico de The Addams Family parece portado de un juego de ZX Spectrum pero con el añadido del color. De hecho, muchos de sus sprites parecen reciclados de esta versión de micro-ordenador lo que conlleva que algunas habitaciones pequen de monótonas o con un uso de color inadecuado, atosigándonos con unos marrones y amarillos muy sosos.
Aun así, conserva detalles pequeños como ese pequeño scroll parallax que nos encontraremos nada más empezar la aventura con una luna y estrellas que nos siguen allá a donde vamos.
Música y Sonido
Nos acompañará en todo momento la típica sintonía de la serie de televisión de The Addams Family, bastante fiel y representada como mejor se ha podido, con los instrumentos clásicos de todo juego de Ocean.
El sonido cumple y no hace muchas más pretensiones.
Detalles y Curiosidades
Nos consta que hubo una versión prototipo cuyo estilo gráfico distaba un poco de lo finalmente visto en la versión final, donde podíamos apreciar un sprite de Gómez mucho más caricaturesco, fresco, divertido y agradable, pero que seguramente a causa de los parpadeos de sprites, se tuvo que desechar.
Conclusión
Si omitís todos esos errores y fallos garrafales que tiene el juego, os vais a encontrar con una aventura muy buena que nos da una libertad de exploración con sabor a metroidvania.
Todas las capturas de este artículo han sido sacadas de MobyGames y de The Cutting Room Floor.
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